El Sirio es el principal ejercicio anual de adiestramiento en el ámbito nacional de las unidades del Ejército del Aire y del Espacio. En un escenario de combate ficticio, este ejercicio ha enfrentado a dos naciones en conflicto cuya disputa ha permitido a nuestra fuerza aérea explotar todas sus capacidades desplegadas para la ocasión en las islas Canarias.
Una democracia parlamentaria asentada ve como otro país, un estado totalitario, intenta apropiarse por la fuerza de un yacimiento mineral de tierras raras submarino en sus aguas territoriales. Así el estado democrático deberá asegurar el dominio del espacio aéreo en la zona del océano bajo cuyas aguas se encuentre el disputado yacimiento minero.
Se ha desarrollado entre el 22 y el 30 de octubre, con la base aérea de Gando como centro de operaciones, y el aeródromo de Lanzarote como base de despliegue.
Planeado y dirigido por el Mando Aéreo de Combate (MACOM), estas maniobras tienen como objetivo mantener el adecuado grado de adiestramiento y alistamiento de las unidades, integrando en un solo ejercicio las múltiples capacidades de combate y apoyo al combate, así como del sistema de vigilancia y control aeroespacial. Se instruye y evalúa a las unidades aéreas del Ejército del Aire y del Espacio para garantizar su preparación en operaciones reales, activando todas sus capacidades en un único ejercicio.
Se trata del ejercicio nacional más exigente del Ejército del Aire y del Espacio. Participan más de 1500 aviadores pertenecientes al Ala 11, Ala 12, Ala 14, Ala 15, Ala 23, Ala 31, Ala 35, Ala 46, Ala 48, Centro de Inteligencia y Targeting Aeroespacial (CINTAER), Escuadrón de Apoyo al Despliegue Aéreo (EADA), Escuadrilla de Honores (EDHEA), Escuadrón de Zapadores Paracaidistas (EZAPAC), Grupo de Alerta y Control (GRUALERCON), Grupo Central de Mando y Control (GRUCEMAC), Grupo Móvil de Control Aéreo (GRUMOCA), Grupo Norte de Mando y Control (GRUNOMAC), Segundo Escuadrón de Apoyo al Despliegue Aéreo (SEADA) y a la Escuadrilla Plus Ultra de la Guardia Real. Junto a ellos participan además miembros del Ejército de Tierra, Armada y fuerza aérea portuguesa, pertenecientes al 201/301 Fighter Squadron con sus aviones de combate F-16M.
Como novedad cabe destacar que dos aviones tripulados remotamente (RPAS) Predator B han operado desde el aeródromo de Lanzarote, estacionando el resto de aeronaves en la plataforma militar de la base aérea de Gando. Los vuelos del Predator se han llevado a cabo en las zonas reservadas próximas a Fuerteventura, realizando misiones de Inteligencia, Vigilancia y Reconocimiento (ISR).